Este es un bizocho que, nada más verlo, te despierta una sonrisa. Es tan mono....
Así que, sobre todo si tenéis invitados, no podéis dejar escapar la ocasión de prepararlo.
Los sentidos de la vista, olfato y gusto van a funcionar a pleno rendimiento...
Dificultad: Muy fácil. Más vale maña que fuerza.
Tiempo de preparación aproximado: 30 minutos preparación + 35 minutos horneado
Raciones: 12-16
Molde: yo he utilizado uno circular de silicona de 23cm.
INGREDIENTES
- 4 huevos a temperatura ambiente
- 180g. azúcar
- 1 cucharada sopera rasa de azúcar avainillado
- 250ml. leche a temperatura ambiente
- 250ml. aceite girasol
- 220g. harina
- 80g. maizena
- 1 sobre de levadura Royal (16g.)
- 3 cucharadas soperas rasas de cacao en polvo
- 1 pizca de sal
- Precalentamos el horno a 180º, posición "arriba y abajo".
- En un bol batimos los huevos con el azúcar y el azúcar avainillado, unos 3 minutos hasta que veamos que la masa blanquea.
- Incorporamos la leche, el aceite y una pizca de sal. Batimos un minuto más para integrar bien todos los ingredientes.
- Añadimos la harina, la maizena y la levadura tamizadas. Lo mezclamos suavemente con la espátula.
- Volcamos la mitad de la masa en otro bol, al que le añadiremos las 3 cucharadas soperas de cacao en polvo y lo mezclamos bien.
- Colocamos la rejilla del horno en la superficie de trabajo y encima en molde. Si es de silicona no hace falta hacerle nada. Si no es el caso, lo engrasamos con un poco de aceite de girasol o mantequilla. El hecho de tener fuera la rejilla y colocar el molde encima es para que la masa se mueva lo menos posible cuando lo introduzcamos en el horno, pero esto sólo es necesario si el molde es de silicona. Si es de los rígidos la rejilla que espere metida en el horno.
- Y ahora viene el momento artístico, que no es otro que el montaje de las masas. ¡Y que no se me asuste nadie, que es muy fácil!
- Ponemos 5 cucharadas soperas de la masa blanca en el centro del molde. Luego ponemos 5 cucharadas soperas de la masa de chocolate en el centro de la blanca...y así sucesivamente hasta acabar con las dos. ¡¡¡Pero atención!!! Las masas se van expandiendo ellas solitas hacia los bordes, así que por lo que más queráis no vayáis volcando el molde para que se esparzan, porque en lugar de cebra os puede salir un guepardo o un gato montés...
- Espolvoreamos por encima un poco de azúcar avainillado (más o menos el contenido que cabe en una cuchara sopera rasa) e introducimos en el horno en el nivel medio. Horneamos 30 minutos. Apagamos y lo dejamos dentro 5 minutos más.
- ¡Listo! No me diréis que no queda ideal...
DE ESTA RECETA TE INTERESA SABER...
Congelación: Sí, unos 3 meses. Pero esto no sé ni para qué lo pongo, porque nunca sobra nada...
¡qué buena pinta! me lo apunto para hacerlo este fin de semana
ResponderEliminardesde luego q despierta los sentidos! Y más a estas horas de la comida! Enhorabuena pinta genial! ;-)
ResponderEliminar¡Gracias Esther! Prueba a prepararlo un día y verás como no defrauda...Queda monísimo y está sensacional...
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