Una tarta fresquita y ligera, apta sobre todo para los días de comilona en los que queremos hacer la digestión de una forma medio decente...
Dificultad: La única que le veo es encontrar los sobres de cuajada por el armario de la cocina...
Tiempo de preparación aproximado: 20 min. + tiempo para que cuaje (mínimo 4 horas). Esta tarta es mejor prepararla el día de antes.
Raciones: 12-14
Molde: desmoldable de 23cm. Para las cantidades que os doy sale de un grosor de unos 3 cm.
INGREDIENTES
Para la base:
- 8-10 galletas digestive de avena
- 60g. mantequilla
Para la tarta:
- 600ml. leche desnatada
- 2 sobres de cuajada
- 400ml. nata para montar
- 150g. azúcar
- Trituramos las galletas y añadimos la mantequilla derretida. Mezclamos bien y la colocamos en el fondo del molde, bien apretadita y ajustada a los bordes. Yo no le pongo mucha mantequilla porque me gusta que la galleta quede un poco suelta.
- Reservamos en la nevera mientras preparamos la crema de la tarta.
- En un cazo ponemos la nata y la leche. De la leche nos reservaremos un vaso para disolver los sobres de cuajada.
- Cuando empiece a hervir añadimos el vaso con la cuajada disuelta y el azúcar. Dejamos que vuelva a hervir. Separamos del fuego unos segundos y lo volvemos a poner a calentar para que hierva de nuevo. Retiramos y volcamos al molde.
- Dejamos que se enfríe y la guardamos en la nevera, un mínimo de 4 horas hasta que cuaje. Como digo, es mejor que esta tarta la preparéis de un día para otro.
- Sacamos, desmoldamos y decoramos con la mermelada que más os guste. Yo en este caso con una de naranja dulce. ¡¡¡Qué buena!!!
DE ESTA RECETA TE INTERESA SABER...
Congelación: La podéis congelar unos 3 ó 4 meses.
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